martes, 14 de julio de 2009

OGROS

Un ogro (ogresa en femenino) es una criatura humanoide horrenda de la mitología de muchos países. Suelen aparecer en cuentos populares de hadas en los que suelen alimentarse de personas, especialmente niños y niñas. Cuando son pintados se les suele representar con una gran cabeza, mucho pelo hirsuto, normalmente barba abundante, abultada panza y cuerpo fornido. En la literatura fantástica actual y otros medios suele ser representado como una especie orco gigante.


















Ogro viene del frances, posiblemente derivado del latín Orcus, terrible dios del submundo (en italiano ogro es orco). El término fue originalmente usado por Charles Perrault (1628-1703
















La primera aparición de la palabra "ogro" en la obra de Perrault es en Histoires ou Contes du temps Passé (1697). Más tarde aparecerá en otros de sus cuentos de hadas, muchos de los cuales están basados en los del napolitano Basile.












El primer ejemplo de "ogro hembra" aparece como "ogresa" en su versión de La Bella Durmiente,mientras el relato de los hermanos Grimm es bastante simple ya que, principalmente, está dirigido a un público infantil; Perrault añade comentarios perspicaces e incluso comentarios humorísticos.Otro aspecto que se le ha criticado tiene que ver con el machismo que se advierte, por ejemplo, entre los dones que entregan las hadas. El escritor francés no añade "inteligencia" como sí lo hacen los hermanos Grimm. Es más, el primero dice que el pinchazo se debió a que era "atolondrada".
Despues de la boda, el cuento de Perrault continua con las perversidades de la madre del príncipe, con muchas características de ogro, que quiere comerse a los niños y a la princesa

















FRAGMENTO DEL CUENTO ORIGINAL(La bella Durmiente)

"Pasaron a un salón de espejos y allí cenaron, atendido por los servidores de la princesa; violines y oboes interpretaron piezas antiguas pero excelentes, que ya no se tocaban desde hacía casi cien años; y después de la cena, sin pérdida de tiempo, el capellán los casó en la capilla del castillo, y la dama de honor les cerró las cortinas: durmieron poco, la princesa no lo necesitaba mucho, y el príncipe la dejó por la mañana temprano para regresar a la ciudad, donde su padre debía estar preocupado por él.
El príncipe le dijo que estando de caza se había perdido en el bosque y que había pasado la noche en la choza de un carbonero quien le había dado de comer queso y pan negro. El rey: su padre, que era un buen hombre, le creyó pero su madre no quedó muy convencida, y al ver que iba casi todos los días a cazar y que siempre tenía una excusa a mano cuando pasaba dos o tres noches afuera, ya no dudó que se trataba de algún amorío; pues vivió más de dos años enteros con la princesa y tuvieron dos hijos siendo la mayor una niña cuyo nombre era Aurora, y el segundo un varón a quien llamaron el Día porque parecía aún más bello que su hermana.
La reina le dijo una y otra vez a su hijo para hacerlo confesar, que había que darse gusto en la vida, pero él no se atrevió nunca a confiarle su secreto; aunque la quería, le temía, pues era de la raza de los ogros, y el rey se había casado con ella por sus riquezas; en la corte se rumoreaba incluso que tenía inclinaciones de ogro, Y que al ver pasar niños, le costaba un mundo dominarse para no abalanzarse sobre ellos; de modo que el príncipe nunca quiso decirle nada..."



En las skazki, las narraciones populares rusas de tema maravilloso, aparecen una serie de personajes sobrenaturales cuyas raíces se hunden en el pasado más remoto del folclore eslavo. El más conocido es la bruja Baba Yaga, ambivalente ogresa del bosque que devora niños y viaja a gran velocidad montada sobre un enorme mortero.

Baba Yaga no resulta muy agraciada. Su aspecto corresponde al de una vieja horriblemente fea, alta y delgada, tanto que en algunos cuentos se la llama “Baba-Yaga pierna huesuda”. El pelo gris le flota enmarañado en torno a la cabeza, su nariz es aguileña y sus dientes largos, afilados y lo suficientemente resistentes como para roer con ellos el tronco de los árboles a los cuales huyen los protagonistas de algunos relatos. Esconderse de ella resulta una empresa difícil debido al magnífico olfato del que disfruta, aunque merece la pena intentarlo, pues de caer en sus garras es probable terminar en el horno de su casa, cocinados y servidos a la mesa de la bruja.

También la palabra "ogro" viene de "ugri", la etnia de los magiares. Cuando los magiares llegan a Europa durante el medievo, se dedican a realizar saqueos y pillajes por todo Europa central, llegando a Francia. Su fama de crueles sanguinarios y malvados, permaneció en la mente de la gente de toda Europa

















El escritor de fantasía épica Robert E. Howard creador de Conan el bárbaro y Solomon Kane especula en sus cuentos que fueron los neandertales sobrevivientes hasta fechas históricas los que inspiraron el mito de los ogros. Curiosamente, estudios científicos modernos parecen indicar que algunos clanes neandertales comían carne humana

Ogros y Ogresas,bestias gigantescas sin piedad,tan grandes como su voraz apetito,comen carne humana deleitandose en ello y en su maldad...y como seran sus otros apetitos,los sexuales,con su tamaño y su barbarie y falta total de piedad y escrupulos,podrian habitar en las fantasias de mas de uno o una...
...buenas noches y dulces sueños,niños y niñas